Vuelve, memoria, y cuéntanos
del sol celeste de ese Aurora.
Nárranos el júbilo de sus victorias,
la tristeza de sus derrotas.
Devuélvelos al presente:
Trasparece en el césped
las veloces gambetas
del Patato Méndez,
y la figura de José Luis Balderrama
plantado por toda la cancha
como la sombra de un capitán
por la cubierta del barco.
Retrata a Jorge Morales,
fogonero incansable,
y, al estallido del gol,
la bandada de brazos del entusiasmo.
Enfoca al adolescente al arco
en esas tardes radiantes
o lluviosas,
extendido como relámpago
debajito del travesaño
con la pelota
imantada entre sus manos.
Haz que salgan ya del vestuario
uno tras otro, todos
con el hermoso
número blanco en la camiseta…
Y que reinicien el juego
para sacarnos el peso del tiempo
y le continuemos ganando
al olvido, al tedio,
a tanta ausencia.
Vuelve, memoria, y empieza:
La pelota ya está en el centro.
Poema de Eduardo Mitre, publicado en el Libro GRITA LA HINCHADA, GRITA LA HINCHADA… de Fernando Mayorga