El fútbol boliviano vivió otra edición del enfrentamiento entre The Strongest y Bolívar, el Clásico con más historia en Bolivia. En este tipo de partidos, el desnivel se produce por los más mínimos detalles. Fue así en el Hernando Siles de La Paz, la idea menos esperada pintó el partido de Celeste. En su tercera presencia, Zago se llevó el triunfo.
La Academia arrancó con todo. El Tigre guardó a tres jugadores que estuvieron desde el arranque en Ecuador y su estrategia no funcionó al inicio. El primer tiempo se convirtió en un monólogo de Bolívar atacando por banda izquierda con facilidad. Da Costa, Rodríguez, Fernández y hasta Sagredo generaron peligro en el arco Aurinegro.
Corrían los 37 minutos, en una de esas jugadas a puro regate Pato consiguió una falta cercana al poste entre la Norte y Preferencia. El mismo argentino acomodó la pelota, toda la artillería subió al área, los futbolistas del Tigre marcaban la posición adelantada de los brasileños y nació una idea diferente. Patricio Rodríguez aplicó algo que ensayaron en la práctica. Mandó un balón retrasado para Roberto Fernández y este fusiló la portería rival.
Ante la debilidad expuesta y la poca claridad ofensiva, The Strongest tuvo que reformular su plan para el complemento. Díaz optó por Amaral y Demiquel en lugar de Chura y Castillo que se retiró con molestias. El uruguayo prácticamente equilibró el Clásico. El local a efectos de recaudación empezó a llegar con peligro. La respuesta de Bolívar casi sentencia el partido, aunque fue cayendo a medida que pasaban los minutos.
Rubén Cordano empezó a volverse en figura, tras reiteradas llegadas del rival. Asimismo, muchos jugaron condicionados por diversos momentos de brusquedad que el árbitro no pudo controlar de la mejor manera. Con siete de adición, la tensión era mayor y José Sagredo sumó su segunda amarilla. Los diez de Bolívar se abocaron a defender y tener la pelota para que se consuma el tiempo y los once de The Strongest buscaron hacer daño.
El pitazo final desató la fiesta Celeste en el Siles, aunque también la rabia y la impotencia Aurinegra. Como en otros pasejes del encuentro, hubieron amagues de pelea, en dos la policía tuvo que intervenir para separar. Al final, la mejor respuesta fue de la gente en las tribunas, llenaron el estadio en un 80% y convivieron en paz, aunque las sonrisas y los festejos fueron de los bolivaristas después de tres Clásicos desde 2020.
“Creo que la gente y nosotros merecíamos esta alegría y este Clásico, es muy duro perder y quedar eliminado, pero esto es así, hoy se ganó mucho”
Patricio Rodriguez
“En el primer tiempo hubo solo un equipo, que fuimos nosotros. En el segundo tiempo mejoraron, son un gran equipo, pero lo importante es que quedamos con los tres puntos”
Antonio Carlos Zago
