El mítico estadio Nacional de Santiago fue el escenario deportivo del partido entre la selección de Chile y la selección de Bolivia por la fecha 8 de las Eliminatorias rumbo al mundial 2026. Los dirigidos por Óscar Villegas fueron inteligentes, confundieron por completo a la Roja, además fueron eficaces y consiguieron tres puntos históricos en tierras chilenas con goles de Algarañaz y Miguel Terceros.
A pesar de tener una sanción en cima por actos de discriminación las pasadas fechas de Eliminatorias y estar en una mala racha de derrotas, los hinchas chilenos llegaron masivamente hasta el estadio con la esperanza de conseguir la segunda victoria en el torneo, con banderas, globos y una banda que no dejó de tocar, hicieron sentir su apoyo. También, obviamente en menos cantidad, la Verde tuvo a sus aficionados que con la tricolor colgada en las graderias y la polera bien puesta apoyó a Bolivia.
Los primeros 45 minutos comenzaron como se esperó, la selección local tuvo el domino del balón pero sin profundidad y con mucho desorden; los comandados por Villegas tuvieron la misión clara desde el inicio, estar firme en la defensa, presionar en el medio campo y salir de contragolpe rápidamente. Justamente al minuto 12, los bolivianos recuperaron la pelota en el medio sector, Carmelo Algarañaz comenzó la jugada combinando con Roberto Carlos Fernandez, quien desbordó por la banda izquierda y devolvió el balón a Carmelo, para que el delantero boliviano defina frente a Arias y marque el primer tanto de la tarde.
La primera conquista boliviana fue un balde de agua fría para Chile, que no reaccionó y siguió desordenado en la cancha; tan grande era el mal estar del técnico Garéca que a la media hora de juego hizo el primer cambio de jugadores. A falta de cinco para el fin del primer tiempo sucedió una situación más que curiosa la cual desencadenó el empate momentaneo chileno: El arquero de Bolivia, Carlos Lampe recibió la pelota y al instante se desplomó al suelo alegando haberse lesionado, dejó la pelota en juego y el delantero chileno Eduardo Vargas agarró el esférico e ingresó hasta el arco para marcar el 1-1. A pesar del reclamo de los jugadores bolivianos por falta de fair play del de camiseta Roja, el gol fue convalidado.
Sin tiempo a lamentaciones, los bolivianos sacaron del medio campo y al instante volvieron a atacar por la banda del jugador del partido, Roberto Carlos Fernandez, quien desbordó y dio un gran pase a Miguel Terceros para que marque el segundo tanto de Bolivia. Con victoria de los de Villegas finalizó la primera parte, que fue histórica para nuestra selección, ya que por primera vez se hizo dos goles de visitante al cuadro chileno.
La segunda parte tuvo al cuadro chileno volcado al arco defendido por Viscarra, que suplió bien a Lampe y evitó el empata en más de una ocasión. Los corazones bolivianos se pararon en los minuto finales, ya que el árbitro cobró penal a favor de Chile por una supuesta mano de Medina, pero con apoyo del VAR el árbitro se retractó, ya que la pelota rebotó en el cara del boliviano.
Tras 8 minutos de agregado, el árbitro Juan Gabriel Benítez tocó el pitazo final, el que desató la alegría de los jugadores de Verde en Santiago y de once millones de bolivianos que no se despegaron del televisor o la radio en ni un momento. Pasaron 31 años desde la última victoria de nuestra selección de visita, son tres puntos que permite alegrarse, emocionarse e ilusionarse.
