El torneo de aguas abiertas Isla de Sol-Isla de la Luna, que se disputa mañana en el lago Titicaca pasará una prueba de fuego, pues será observada por un enviado de la Confederación Sudamericana de Natación (Consanat), que tras su realización determinará si otorga el aval internacional al evento, que es organizado por la Federación Boliviana de Natación (Febona) y el Club de Tenis La Paz (CTLP).
La séptima versión de la competencia, a la que han asegurado su presencia 40 deportistas entre nacionales y extranjeros, tendrá como veedor al peruano Jorge Delgado, vicepresidente de la Consanat.
Gladys Chávez, capitana de natación del CTLP y directora del torneo, anunció que al finalizar la prueba el enviado entregará un informe a la Febona con observaciones y sugerencias, de acuerdo con lo que establece la norma internacional. También se evaluará si la altitud y la temperatura del lago, “son factores que influyen a la hora de competir”, según Chávez.
Añadió que después de seis años de desarrollo se considera que se cumplen con todas las normas internacionales, y “de una vez queremos acabar con los mitos de que la altura afecta a los deportistas, por eso será como nuestra primera inspección para que este campeonato se integre a la confederación”.
Delgado, por su parte, manifestó que en la actualidad se efectúan estudios con relación a la temperatura del agua, tanto fría como caliente, en una universidad de Nueva Zelanda.
Cinco países en la prueba
Un total de 40 deportistas, en representación de cinco países —Bolivia, Chile, Argentina, Perú y México— participarán de la séptima versión del torneo Isla del Sol-Isla de la Luna. Los bolivianos serán 27, de los que dos serán debutantes: Mikaela Muñoz y Sergio Biggemann. Además de los nadadores de La Paz y El Alto, llegarán desde Oruro, Cochabamba, Tarija, Santa Cruz.
Entre los equipos del exterior destaca la presencia del team Stadio Italiano de Chile, que arribó con cuatro atletas: Pilar Caviedes, Óliver López, Luis Mora y Álvaro Carmona. Para todos será su primera visita al país y su objetivo principal es terminar la carrera, ya que el factor altura les jugará en contra.
Otro trasandino, Ricardo Grancate, competirá por tercera vez en este evento. “Me encantó desde la primera vez que vine aquí, el lugar es precioso y como desafío deportivo es tremendamente atractivo por el grado de dificultad que ofrece”, sostuvo.
Fuente: La Razón