The Strongest recibió la visita de Guabirá por la fecha 7, que fue reprograma, en el Estadio Hernando Siles; el Tigre se puso al día en los partidos a comparación de los demás y ganó por la mínima al conjunto Rojo de Montero. El Pampa volvió con victoria al banquillo Atigrado y extiende el liderato con cinco puntos a comparación del segundo que es Nacional Potosí.
La primera parte, el local fue dueño de la pelota, con Ortega, Triverio y con una sorpresiva gran actuación del sub 20, Fabricio Quaglio, quien fue el jugador desequilibrante en la cancha. El portero Azucarero, “Manotas” Arauz, evitó el gol desde el principio, fue pieza clave para que el Tigre no concrete varias jugadas de gol.
A los 16′ minutos, cuando el conjunto dirigido por el Pampa se aproximaba con mucho peligro al área Roja, Quaglio lanzo un centro al área, el cual fue interceptado por el uruguayo Arias quien con gran técnica cabeceó al arco y la pelota terminó en las redes, el primero del Tigre fue festejado por la parcialidad Stronguista y los jugadores, que lo tomaron como un “desahogo” por los últimos malos resultados de los partidos recientes.
El Tigre se pudo ir al descanso con más goles a favor, pero la mala fortuna, la falta de eficacia y la buena actuación de Arauz hicieron que la ventaja sea mínima los primeros 45.
El segundo tiempo, fue muy parecido al primero, los Atigrados al ataque y los Azucareros en el área esperando algún contragolpe; los locales no tuvieron intensidad y de manera tranquila atacaron, generaron pocas opciones claras de gol, pero cuando decidieron ser peligrosos lo fueron y lastimaron la defensa Montereña; Arauz tuvo un gran partido y el arco visitante estuvo blindado.
A pesar de la victoria y liderato, el hincha del Tigre no se fue satisfecho, por momentos, la silbatina bajo de las graderías y eso incómodo a Biaggio, quien con gestos expresó su desacuerdo y pidió el apoyo de la parcialidad local.