Martin Smedberg disfruta más que nadie de su primera experiencia en el fútbol boliviano, en su debut en el Siles terminó en lágrimas, y tras anotar su primer gol explotó de emoción y prometió que será el primer de muchos.
Entonces, la pregunta era inevitable, el siguiente partido es el Clásico Paceño, el más importante del país, y del que se habla si eres futbolero como su padre “Claro que es especial, es un partido del que hablan todos, mi padre me contó mucho de los Clásicos, y yo vi muchos clásicos desde Suecia”, contó. Es que su papá es un hincha atigrado que transmitió su pasión en la familia.
“Mi papá es hincha del Tigre, yo no, pero él también es hincha del Barcelona y yo soy hincha de Real Madrid, entonces no es la primera vez que peleamos papá e hijo por una situación de gustos en fútbol”, contó con una sonrisa cómplice como lo hace siempre.
Amable con los medios y dejando en claro, que jugar el Clásico Paceño, será otro sueño cumplido en su carrera profesional: “Tomo con muchas ganas este reto en mi carrera y prometo dejar todo en la cancha por el Bolívar”, dijo. Su padre, Ramiro Dalence, es el que debe separar su amor por su club y el de poder ver feliz a su hijo.
