Pocos son los personajes con los que las cámaras del mundo pueden hacer un festín en el fútbol, “El Piojo” Miguel Herrera es uno de ellos.
Se despidió del Mundial con su sorprendente México, eso sí con mucho orgullo en la cancha y con ganas de seguir, pero con muchas críticas al arbitraje se va un hombre que vive intensamente y lo expresa en cada juego que le toca dirigir.
Herrera, no pudo aguantar el resultado, optó por sacar a Gio Dos Santos e incluír a Aquino, un volante por un delantero, marcando claramente la intención de cuidar el tanto del jóven delantero. La ecuación le salió mal, un penal muy reclamado por México le terminó dando la victoria a Holanda.
“Le regalamos la posesión de la pelota a ellos, pero nosotros corríamos más. Físicamente el equipo estaba bien, estaba sólido. El penal fue inventado, no cuenta como llegada de ellos; demostramos que Holanda es un equipo muy vulnerable… Hoy nos gana el árbitro. Fue una mala decisión arbitral la que nos deja fuera. Esperemos que el árbitro también se vaya a casa. No terminas perdiendo por lo que ellos hicieron, terminas perdiendo por un penal que no existe. Tres veces se tiró clavado Robben”, dijo el DT.
“Tienes lapsos de partidos en los que te descuidas y viene el gol del empate; pero jugar a esta temperatura a cualquier equipo le rompe el ritmo, no puede aguantarse 90 minutos”.
“Sentía que el equipo podía conseguir el resultado. Me voy tranquilo, me voy orgulloso de haber dirigido a estos muchachos, hicimos cosas que nos dejaron muy tranquilos. Si el árbitro es justo, el segundo gol de ellos no existe y Arjen Robben se va expulsado por segunda amarilla. Vamos a hablar con los muchachos, están muy tristes. Es muy doloroso irte de esta forma”, Dijo un Herrera sin filtro al terminar el partido.
El bombero que apagó el incendio más grande en el la historia del fútbol mexicano, habló también de su futuro, “Llegando a México veremos qué pasa”. Finalizó.
