Platiní recurrió a una defensa plagada de juventud

Blooming jugó más de 30 minutos con una zaga de juveniles.
Foto: Agencia Marka Registrada
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En el partido que sostuvo Blooming contra Guabirá en Montero se registró algo inédito en el fútbol boliviano. Tras la salida de Velázquez por lesión, Erwin Sánchez colocó a Urapuca en su lugar, de esa forma generó la defensa más joven de los últimos tiempos con un promedio de edad de 20 años; todos son del país. Fueron más de 30 minutos que jugaron así y pudieron revertir el resultado adverso, aunque se lo empataron sobre el final.

El lateral derecho fue Robert Cueto de 19 años; el central por esa banda, José Carrasco de 21; a su lado Leonardo Urapuca de 20 años suplió al experimentado argentino; y Roberto Fernández de 19 estuvo por la banda izquierda. Incluso el dueño del pórtico en ese encuentro fue Rubén Cordano de 20 años. Ninguno de ellos debutó, al contrario, en algunos volvieron a la titularidad.

En el balompié boliviano mayormente la experiencia manda en la última línea de todos los equipos, hasta para Sánchez que comenzó a dar confianza a juveniles de medio campo para arriba, le costó hacerlo en la defensa. Él comenzó con los laterales (titulares en la Selección Sub-20), luego encontró a Urapuca y Carrasco se ganó la titularidad en las últimas fechas. En el plantel también cuenta con un refuerzo para esta temporada que jugó en la primera fecha, Brandon Torrico de 20 años.

Encontrar una marca de estas características es difícil, posiblemente cuando algún técnico optó por jugar con equipo alterno el promedio se aproxime al que produjo Sánchez. Este entrenador tiene y continúa dando oportunidad a los juveniles, ahora en todas las líneas. No ha sido una novedad que cinco jugadores hayan sido parte de la Selección Sub-20 que disputó el Sudamericano en Chile.

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