No alcanzó con los gladiadores que tuvo Bolívar

A los celestes no les alcanzó con tener un gran coraje y una entrega inusual en nuestro fútbol. Walter Flores conmovió con el despliegue.

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A los celestes no les alcanzó con tener un gran coraje y una entrega inusual en nuestro fútbol. Walter Flores conmovió  con el despliegue y la garra que desplegó a lo largo de los más de 90 minutos jugados, pero no fue suficiente.

En el primer tiempo le costó mucho contagiar a sus compañeros, algo de Pedriel, Yecerotte comenzaba a poner esa cuota de espíritu para tapar los huecos del desequilibrio planteado, en una arriesgada apuesta de Soria, su equipo tuvo entre los once que presentó, a seis jugadores con vocación de ataque.

Es ahí que el sacrificio de Flores, Yecerotte, Callejón, el mismo Ferreira tuvo que ser prácticamente obligatoria para los celestes, que tuvieron a un Cabrera inspirado para ir al piso una y mil veces para que su arquero no quede mano a mano -no lo pudieron evitar siempre- pero entre Flores, Cabrera, Gutiérrez y Yecerotte se las ingeniaron para intentar equilibrar un partido desequilibrado desde el primer minuto.

León mucho más prolijo, nunca se terminó de animar, la influencia de Matosas en el tema altura, o simplemente el conformismo de saberse ganador desde el vestuario -minuto 2- hicieron de León un buen equipo, ordenado, prolijo, temible, pero indeciso.

Damir Miranda -que no tuvo un buen partido- dejó su lugar para Lorgio, Pedriel para Arrascaita y el equipo de Bolívar mejoró, Lorgio más bicho por la banda izquierda equilibró a Bolívar y el yungueño sacó la gala de su fútbol y su entrega para sumarse a la lista de gladiadores celestes.

Otra vez la intensidad del fútbol continental, algo que en Bolivia añoramos y que lastimosamente no estamos acostumbrados a ver, ha dejado en las retinas un gusto agridulce, el sabor de que Bolívar podía quedarse con la victoria, pero si no hubiera sido por el gladiador del arco, el partido pudo haberse quedado con los mexicanos que fueron más claros que los celestes.

Sin pelear tanto los de Guanajuato, convirtieron al campo de juego en un campo de batalla, los celestes fueron a la guerra sin muchas armas -pero con mucho coraje- lastimosamente no les alcanzó para quedarse con los tres puntos, lastimosamente a nuestros equipos aún les faltan las armas necesarias para lidiar estas batallas.

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