Después de caer sobre la hora en su visita a Santa Cruz, el técnico del Tigre, César Farías, declaró ante los medios. ¿Su mensaje? No desanimarse y enfocarse en lo que viene.
“Todavía queda mucho campeonato. Es difícil jugar con diez. (…) El gol de entrada le permitió al rival defenderse mejor, jugar como visitante”, analizó.
Sobre el arbitraje, prefirió no hablar demasiado. “El saldo es malo para nosotros. Después, si hubo justicia o no, lo analizarán ustedes”, se limitó a decir.
“No le quiero echar la culpa a nadie, lo que me incomoda es la provocación. No está bien. (…) En algún momento va a salir todo a flote”, concluyó.
El venezolano se ausentará por varios días para cumplir con su rol de entrenador invitado en la selección nacional, que enfrentará a Irak y Emiratos Árabes.