El miércoles, en los primeros pasajes del partido ante Serbia, Marcelo sufrió un fuerte espasmo en la columna que lo obligó a dejar el campo de juego (lo hizo con lágrimas en el rostro).
Tras evaluarlo, el jefe del cuerpo médico del Scratch, Rodrigo Lasmar, aseguró que ya había empezado a tratar al lateral del Real Madrid, pero no garantizó su presencia en el partido contra México.
En principio, el jugador guardará reposo por 48 horas. Y dependiendo de su evaluación, se verá si es conveniente incluirlo entre los once titulares el lunes, cuando la Canarinha se juegue el pase a cuartos de final.