Tras 12 días de competencia, la Selección Sub-23 se despidió con un balance positivo a ojos de los jugadores y del cuerpo técnico. La Verde acabó cuarta en el Grupo A y fuera de zona de clasificación, gracias a su empate con la anfitriona y su victoria frente a Colombia. Antonio Carlos Zago usó a 22 de sus 23 jugadores convocados y estos fueron sus números.
Gabriel Villamil fue el único que completó los 4 partidos de la Selección Sub-23, además lo hizo portando el cintillo de capitán. Jairo Quinteros, Diego Medina, José Miguel Briceño, Lucas Chávez, Miguel Villarroel, Javier Uzeda y Jeyson Chura también estuvieron en todas las presentaciones. Daniel Sandy, el tercer arquero, no sumó minutos en el Preolímpico.
Bolivia registró 1 triunfo, 1 empate y 2 derrotas con 5 goles a favor y 6 en contra. Briceño fue el máximo goleador con 3 tantos, Villamil y Chávez marcaron 1. En cuanto a asistencias, Chávez, Carlos Sejas y Villarroel lograron 1. Solo 3 jugadores recibieron suspensiones; el Chaval se perdió 2 juegos por roja directa, mientras que Marco Salazar y César Romero no pudieron jugar el último partido por acumular 2 amarillas en sus participaciones anteriores.
La peor noticia fue la lesión de Daniel Ribera que en una jugada fortuita contra Brasil sufrió la ruptura de ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda. Se perdió el resto del Preolímpico al necesitar una intervención médica que su club, Talleres de Argentina, la coordinó. Después, el cuerpo médico de la Selección Sub-23 no emitió otro parte que indique alguna complicación de otro miembro del plantel.
