Fue un partido duro en el Siles, y Bolívar encontró soluciones en sus dos gladiadores, hicieron todo casi todo bien juntos y por separado, lo cierto es que la Academia encontró una dupla llena de despliegue y entrega por el bien del equipo.
Marcos Riquelme fue el autor del gol del partido, pero peleó todas, apareció como volante de contención siempre que el equipo lo necesito, fue el primer zaguero a la hora de presionar y defender, un partido de diez puntos hizo el argentino en el Siles.
William Ferreira fue el mejor partner de generación de juego para Erwin Saavedra, todas las buenas llegadas de Bolívar involucraron al uruguayo, incluso en el gol, donde participaron los tres mejores jugadores del equipo de Vinícius, Ferreira hizo una cortina perfecta, pudo anotar el segundo con un golazo que se fue por poco arriba del travesaño de Monetti y también tuvo una gran chance de anotar de cabeza. Pero no sólo fue eso, también fue fundamental en la recuperación de pelota y Ferreira es el jugador clave a la hora de solucionar varios problemas en la pelota parada.
Todo eso le aportan los dos delanteros de Bolívar a la Academia, que desde que los juntó Eutrópio, se les sumó el gran momento de Erwin Saavedra, y son el alma de este equipo que busca recuperar confianza en una semana clave, ya ganó dos partidos de tres partidos decisivos para la Academia.
