La Libertadores ya es historia. Ahora, Wilstermann deberá enfocarse en mantener su buen andar en el torneo doméstico –por ahora, mira a todos desde arriba– para tener revancha en el plano internacional el año que viene.
Por cosa del fútbol, no tendrá tregua: su primer rival después del 0-8 en el Monumental será Oriente Petrolero, que lo persigue de cerca (está a tres puntos) en la lucha por el primer puesto.
Con Mosquera ratificado y la sentida baja de Juan Pablo Aponte, está por verse si el equipo está en condiciones anímicas de despedirse del Félix Capriles –ahora sí, será cerrado por refacciones– con una victoria.
Para ello, el peruano alista una alineación con: Raúl Olivares; Jorge Ortiz, Álex da Silva, Edward Zenteno, Daniel Mancilla; Rudy Cardozo, Fernando Saucedo, Alejandro Meleán, Serginho; Marcelo Bergese y Gilbert Álvarez.