Late en Mendoza. Todos lo daban fuera de la Copa, parece que pasó mucho tiempo de aquella luxación de la acromio-clavicular que sufrió antes de terminar el torneo en Bolivia.
Pero pasaron sólo algunas semanas, y el jugador entró a la lista de 23, y ya hace fútbol de manera regular, entrena con total normalidad con su compañeros y se habla de un “milagro”. Pero para los que saben de la ciencia las claves de su recuperación pasan por el rápido accionar de los médicos el día de su lesión y el gran corazón del “Gran Capitán” boliviano, que se mentalizó en llegar a la Copa y lo consiguió.
El Doctor Carlos Pérez explicó que el tipo en el diagnóstico del jugador y el correcto accionar al instante, sometiéndolo a una cirugía inmediata permitió que Raldes recupere con mucha más celeridad, al punto que los “pernos” sujetadores fueron extraídos antes del viaje a la Argentina, además que la cirugía no dejó huellas ni heridas, todo fue bien pensado y accionado para permitir que Raldes esté bien.
Incluso en el cuerpo médico de La Verde, se encuentra por primera vez con un refuerzo, es el doctor Elmer Pérez, acupunturista que ayuda a los jugadores a reponerse de problemas musculares con más rapidez, y en el caso de Raldes fue un paciente constante en esta estadía en Mendoza, todo esto ayudó, de manera correcta para ver a Ronald Raldes físicamente bien, y listo para jugar la Copa América.
Aunque el DT es más cauto, sabe que su capitán llegará a jugar incluso la primera fase de la Copa América sin problemas: “El esfuerzo que él ha puesto, es estupendo tiene una semana más para recuperarse y estar a pleno para jugar, no vamos a arriesgarlo hasta que no lo veamos como lo fuerte que realmente es”,