Esta vez no alcanzó con los reflejos de Vaca, el coraje de Marteli, la calidad de Castro y el liderazgo de Escobar. The Strongest le hizo frente al mejor equipo del torneo –en números, más allá de cualquier subjetividad– e incluso llegó a tenerlo contra las cuerdas durante varios minutos, tanto en Sacaba como en Sucre. Sin embargo, terminó pagando caro su falta de claridad en ataque. Y ni hablar de los penales…
A lo largo de los 270 minutos de juego, sus delanteros no encontraron los caminos en ningún momento. ¿La prueba de ello? Los cinco goles atigrados en la llave decisiva fueron anotados por defensores: tres de Marteli, uno de Ballivían y uno de Ortiz. Ibargüen, Novoa y compañía, cuyos números a lo largo del torneo tampoco sorprenden, no estuvieron a la altura de un equipo con aspiraciones de campeonar.
Algo similar ocurrió en los penales. Los únicos que convirtieron fueron Marteli y Valverde; Ortiz, Escobar, Ibargüen Henry Vaca y Cardozo no permitieron que Daniel Vaca, que les atajó tres remates a los aviadores, agigante su leyenda. Bastó con que Chávez, Lucas Gaúcho y Óscar Vaca aseguren para que el aviador se quede con un trofeo que parecía pintarse de oro y negro. ¿Llegará un ‘9’ en el próximo mercado?