Bolívar logró la tan ansiada clasificación a la siguiente fase de la Copa Sudamericana, lo hizo tras ganar por 3 a 0 a la U de Concepción de Chile.
Aunque el marcador se abrió temprano para los celestes luego de los diez minutos iniciales el partido se le hizo cuesta arriba para Bolívar, pero no porque el rival haya crecido o mejorado su propuesta sino por errores propios.
El equipo que ya venía desordenado en el primer tiempo y terminó de confundirse más aun en la cancha tras los cambios del entrenador.
Cuando a Bolívar le faltaba un gol para amarrar la clasificación y no ir a ronda de penales, en el minuto 57 Beñat decide meter a Edemir Rodrígez (defensor) por Gastón Cellerino (delantero), los celestes dominaban el partido, no se avizoraba para ese momento chance alguna de gol para el cuadro chileno pero el entrenador hizo un cambio defensivo, la pregunta en la conferencia fue obviamente hacia ese punto y la respuesta fue la siguiente, “estábamos perdiendo oxígeno en el centro, decidimos tener inteligencia meter a Edemir para que controlara la linea de cuatro, el sector derecho nuestro estaba siendo bastante atacado con Edemir hemos conseguido parar todo eso, tener en cuenta que había que tener cuidado porque un gol nos obligaba a meter cuatro”.
El segundo cambio no fue tan desconcertante ya que trató de solucionar esa falta de peligró que se creó con la salida de Cellerino, Walter Flores -el más regular de la cancha hasta ese momento- fue sustituido por Hugo Bargas. Finalmente Rudy Cardozo ingresó por Erwin Saavedra para que el juego vuelva al plan original con el arrancaron,
El resultado fue favorable, se consiguió la clasificación, pero las dudas que genera el entrenador y los cambios defensivos que renuncian a ese juego punzante que puede mostrar Bolívar con los jugadores que tienen hacen ver un panorama difícil ante el próximo rival, el actual campeón de América, Atlético Nacional de Medellin.
