La primera victoria en el año para Guabirá no podía llegar en el mejor momento, previo al partido de vuelta por la Copa Sudamericana contra Macará. Los Montereños vivieron una algarabia total en los vestuarios, pues tuvieron que pasar nueve partidos para que vuelvan a sumar de a tres y que sus delanteros marquen goles.
Además no derrotaron a un equipo que está de media tabla para abajo, fue a Wilstermann nada más ni nada menos que en el Félix Capriles. Arana planteó un equipo mixto, ya que reservó a cinco jugadores para el duelo internacional.
Sin lugar a dudas este resultado refortalece a toda la institución y la hinchada que ya empezaba a pedir la cabeza del técnico. Con un mismo score el jueves que viene podrán revertir el 1 a 2 que sufrieron en Ecuador para pasar a la Segunda Fase del torneo internacional.