El joven H.A.M., quien se culpó de haber lanzado la bengala que provocó la muerte de Kevin Beltrán en el partido de Corinthians contra San José, obtuvo una beca de estudios otorgada por la barra del Timao. En Brasil y Argentina creen que todo es un montaje para salvar a los 12 “torcedores” detenidos en Oruro.
Hoy se cumple un mes del partido en que el equipo orureño igualó con el plantel paulista en el Jesús Bermúdez, en el que falleció el muchacho de 14 años.
El diario Folha do Sao Paulo dio la luz de alerta y otros medios de comunicación de aquel país y prestigiosos periodistas brasileños y argentinos advierten que se preparó todo un montaje para liberar a los 12 “torcedores” de la barra del Corinthians, los Gavioes da Fiel, a partir de la aparición de un presunto culpable de 17 años, quien sería inimputable e inextraditable, de acuerdo con las leyes del país vecino.
Un juez brasileño calificó al intento como una “estrategia infeliz” que apunta a dejar la muerte de Kevin en la impunidad.
La beca para H.A.M.
El rumor del “premio” que recibiría el joven de 17 años, miembro de la torcida corinthiana, de parte de los gavioes circuló por blogs vinculados a barras de fútbol los últimos días de febrero y, el 7 de marzo. Folha publicó la noticia en su edición impresa.
“Él (H.A.M.) terminará la escuela secundaria este año y en el 2014 podría estudiar en una universidad del Este la carrera que desee sin pagar. Los Gavioes da Fiel son los responsables de lograr la beca. (…) El nombre de la universidad que otorgó la beca se mantiene en secreto por los gavioes, porque existe el temor de que el joven sufra represalias por parte de otros estudiantes. La universidad también tiene miedo de que surjan protestas para evitar la concesión que se da al muchacho”, reveló Folha do Sao Paulo hace 13 días.
Cosme Rímoli, veterano y laureado periodista deportivo de San Pablo (Jornal da Tarde), fue el primero en manifestar que el “premio” al torcedor de 17 años era demasiado sospechoso.
“La ‘confesión’ del menor está comprometida. La pregunta es obvia y da miedo. ¿Habrá hablado a cambio de la promesa de la universidad? En Brasil, H.A.M. es menor. Lo máximo que puede soportar es un castigo de tres años en la Fundación Casa y con la tutela de su madre. Con buen comportamiento puede estudiar y trabajar. Tener una vida normal. Si hubiera confesado en Bolivia, podría enfrentar hasta 30 años de prisión”, escribió el periodista en su sitio web.
Rímoli reveló que existen contradicciones entre la confesión del muchacho de 17 años y las pruebas recogidas por la Policía en Oruro. H.A.M. aseguró haber llevado y disparado todas las bengalas en el Jesús Bermúdez; sin embargo, a dos de los torcedores detenidos les detectaron marcas de pólvora en las manos.
“La noticia de la beca tendrá una repercusión directa en la ‘confesión clave’ para liberar a los 12 hinchas. La revelación perjudicará a los presos, revela una relación muy directa entre H.A.M. y los Gavioes da Fiel. Es una ‘coincidencia’ muy extraña”, escribió Rímoli.
OGlobo, parte de la operación
Incluso antes de que Folha do Sao Paulo, la prestigiosa revista Lance adelantó la posibilidad de que se preparaba un montaje para favorecer a los 12 “torcedores”.
El semanario informó, el 27 de febrero, que uno de los líderes de la torcida corinthiana le reveló que un “muchacho” se inculparía por el hecho en uno de los programas “más famosos de la televisión brasileña” y después se presentaría ante la justicia.
El periodista y columnista del matutino argentino La Nación Ezequiel Fernández Moores puso en evidencia el nexo entre la red OGlobo y el Timao.
“La TV Globo, fiel aliada de Corinthians, puso al aire en su programa Fantástico a un menor de edad, inimputable, que se adjudicaba el hecho. Un perito ‘demostró’ luego ante las cámaras, ‘con un ciento por ciento de garantía’, que el menor, efectivamente, había sido el responsable. La intención, por ahora infructuosa, es que la Policía Boliviana libere de una vez por todas a los 12 integrantes de Gavioes da Fiel”, escribió Fernández Moores hace una semana.
El argentino añadió que entre los detenidos en Oruro se encuentra uno de los tesoreros de la poderosa torcida brasileña.
Esta intención también fue advertida por el juez de menores de Río de Janeiro Siro Darlan, quien calificó al hecho como una “estrategia infeliz”.
“Culpar a un adolescente que, en teoría, no responderá a este proceso por no estar en Bolivia sino en Brasil, es una estrategia infeliz con el fin de librar a los verdaderos autores de ese crimen bárbaro que fue llevar una bengala mortal a un estadio”.
El juez adelantó que, de consumarse la “estrategia” de los gavioes, la muerte de Kevin terminará impune. “Teniendo en cuenta que el delito se produjo en Bolivia, la autoridad judicial brasileña no puede hacer nada, ya que tiene jurisdicción sobre los crímenes cometidos en el territorio brasileño. Por otra parte, Brasil no extradita a sus ciudadanos. El Gobierno no extraditará al adolescente a Bolivia”.
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Nota publicada en Página Siete por nuestro periodista (Boris Miranda)
