Cochabamba recibió el duelo entre Wilstermann y Vaca Díez por el torneo Todos contra Todos, el resultado fue un gran partido, más allá de la impotencia de los locales al no poder asegurar el triunfo que en principió les sonreía. El duelo tuvo una etapa para ambos equipos y el resultado fue la igualdad por 2 a 2.
El primer tiempo tuvo un toque aéreo, el Aviador se encargó de llevar el compromiso a su favor, más allá de una mejor propuesta del rival. Corrían los 21 minutos, la nave tuvo un par de conexiones, la primera que partió desde la pierna derecha de Cristhian Machado que en busca de algún compañero, impactó con la cabeza del defensor rival Mizael Pinto y traicionado por el veneno de la pelota, convirtió en propia puerta. Las chances para el portero Israel Peña fueron nulas, igual a la comunicación con su compañero.
A los 38 el Avión volvió a emprender su viaje por las nubes, el punto de partida nació desde la zurda precisa de Francisco Rodríguez, encontró la cabeza de Rudy Cardozo y la cruzó al palo derecho del arco rival. La dedicatoria fue para el entrenador Cristian Díaz que estaba en las tribunas apuntando las virtudes de sus dirigidos.
El vuelo no corría peligro de perder su destino de victoria, sin embargo, la reacción del rival obligó a la repartición del premio. A los 66 el descuento llegó mediante un penal ejecutado por Diego Cuadros, fuerte y al corazón de las redes, como la seguridad manda para dejar sin oportunidades a la respuesta de Arnaldo Giménez que se estiró hacia su palo izquierdo.
La recompensa por creer hasta el final llegó a los 73 aprovechando una imprecisión en la defensa de Wilstermann. La pelota nació desde la asistencia de Joel Fernández por la banda derecha y encontró al inspirado Alexir Ibaguary que empujó las esperanzas por debajo del portero Giménez. De esta manera el empate fue sentenciado y la repartición de los puntos premió el protagonismo de ambas escuadras.