Hernán Boyero se fue de Blooming agradeciendo el cariño de los hinchas y de sus compañeros. “Si por el mundo hay un bluminista dando vueltas, ese soy yo”, dijo. Lo espera Argentinos Juniors, de Argentina
Gol, abrazo fuerte del técnico Víctor Hugo Andrada y ovación sin parar en las tribunas. Hernán Boyero comenzó a emocionarse apenas la pelota dejó de rodar en el Tahuichi, porque luego del segundo gol que convirtió jugando para el equipo titular, Andrada se le acercó para abrazarlo, le deseó suerte y, de inmediato, fue el turno de cada uno de quienes hasta ayer fueron sus compañeros.
Momento emotivo para el ‘Flaco’ que hoy parte rumbo a Buenos Aires para enrolarse a Argentinos Juniors. Sintió que las piernas se le ablandaron; atendió a cada jugador que se le acercó y agradeció por los buenos deseos. Fue el primer contacto en cancha porque luego el mismo plantel le armó un pasillo frente a la tribuna de preferencia donde había unos 2.000 aficionados coreando “Boyero, Boyero, Boyero…”.
El atacante pasó por el centro y de nuevo recibió abrazos y golpes de ‘buena suerte’ en la espalda. La emoción que sintió derivó en lágrimas. El conductor de televisión Pablo Fernández, que jugó los minutos finales para el equipo B, tomó el micrófono y comenzó a pedir el aliento para el goleador. Los bombos y los platillos del grupo Los Chiflados le dieron un matiz especial a una jornada atípica en el Tahuichi.
Hasta la pista atlética ya había llegado Erwin ‘Happy’ Peredo, vicepresidente del club, que fue el encargado de entregarle una plaqueta de reconocimiento por los años que el atacante ha pasado en Blooming. “Queremos reconocer a la persona, al futbolista y agradecerte por el amor que le tienes a la institución”, dijo Peredo mientras Boyero exhibía ante el público el reconocimiento.
Fuente: El Deber
