En 72 horas, Bolívar disfrutó de dos importantes victorias en el Hernando Siles con su gente. En Semifinales, se encontró con un envalentonado Aurora que llegaba de cinco victorias consecutivas al mando de Mauricio Soria. El Equipo del Pueblo se adelantó y en un momento clave que pudo ser su segundo gol, la Academia reaccionó hasta protagonizar una gran remontada por 3 a 1.
Aurora no le tuvo miedo a Bolívar, fue frontal y lo complicó en el primer tramo del partido. Si bien el local empezó a avisar con remates de larga distancia y jugadas colectivas, la visita consiguió un penal. Jesús Sagredo derribó a Oswaldo Blanco y Jordy Alemán necesitó el llamado del VAR para determinar la sanción. Jair Reinoso con potencia y seguridad abrió el marcador a los 18 minutos.
Bolívar se fue perdiendo en el césped. Aurora en su segundo intento claro exigió una reacción de Carlos Lampe y en el rebote Blanco batió la portería, pero el VAR determinó fuera de juego. Ese fue un momento clave porque Bolívar despertó, fue más ordenado en defensa y empezó conectarse más en ofensiva.
En el minuto 32, Ramiro Vaca elevó la pelota de un tiro de esquina al primer palo del arquero y Diego Bejarano saltó para impactar de cabeza superando la resistencia del defensor debajo del palo y de David Akologo. Eso más terminó de levantar a Bolívar y a los aficionados.
En el segundo tiempo, el partido cambió rotundamente. Dio la impresión que Aurora no regresó al campo de juego o que había derrochado toda su energía. Por su parte, Bolívar arrancó con todo decidido a voltear el resultado. De esa forma, comenzó el show de Patricio Rodríguez.
A los 53, el Equipo del Pueblo en su intención de salir rápido cedió el balón. Entonces, con precisión la Academia atacó, Pato recibió y fue penetrando el área desde la banda derecha hasta hallar el ángulo perfecto para el remate, desató el desahogo de Bolívar, pues marcó de gran manera el gol del desequilibrio.
Bastaron 5 minutos más para que otra genialidad del argentino-boliviano acabe en otro tanto de Bolívar. Francisco Da Costa abrió para Patito, volvió a regatear para abrirse espacio y cuando remató Sebastián Zaracho metió la pierna desviando la trayectoria de la pelota y dejar sin reacción a Akologo. La gente disfrutaba del rendimiento, todos los jugadores se sentían más seguros.
El resto del tiempo sobraron las oportunidades de gol principalmente para el dueño de casa, mas faltó la puntada final. La intensidad se fue perdiendo con el pasar de los minutos hasta haber cierto grado de conformismo por ambos bandos. Bolívar se adelanta con dos goles de diferencia en la serie, Aurora necesita ganar por dos goles para forzar los penales o por tres o más goles de distancia para clasificar directamente.