Bolivia lograba su primer y único título de fútbol, aunque suene poco creíble es cierto, hace 50 años era 1963. La dirigencia del fútbol en Bolivia había logrado sumar fuerzas, incluso políticamente opuestas, al mando de Roberto Prada en la Federación Boliviana de Fútbol, había una filosofía unificadora. Con apoyo del gobierno de turno, es cierto, pero con gestiones dirigenciales que también son un ejemplo en estos tiempos de malas acciones, administrativas y federativas.
Bolivia traía a un DT desconocido para el medio, Danilo Alvim era como jugador un gran hombre de la seleción brasilera que sufrió en el Maracanazo, pero como entrenador, poco se lo conocía, se la jugó Prada y le salió bien. Alvim hasta la fecha mantiene el promedio como mejor entrenador de la selección nacional en la realción partidos jugados y puntos obtenidos, lejos de ser una vende humo, Alvim era un hombre de pocas palabras, justas para ganarse el respeto y la admiración de sus jugadores.
El grupo de jugadores conformado por 22 hombres, no tenía suplentes y titulares, casi todos jugaron algunos minutos, Bolivia empezó con un onceno y terminó con otro, aparecieron valores jóvenes que le dieron solidez al equipo. Los Maestros Ugarte y García se hicieron dueños del juego, García quizás hasta fue el mejor del campeonato. Camacho y Ramírez sentaban presencia y respeto, eran los caudillos que llevaban en hombros la presión y el empuje de este equipo. Todos los nombres que formaron un onceno o entraron en algún momento de los partidos respondieron. Además la unidad entre ellos fue la clave, no existían las camarillas en esos tiempos, los jugadores en las concentraciones escuchaban radio, escuchaban el fervor de la gente, se prometían no fallarle.
La gente, que comenzó escéptica con su equipo, terminó idolatrado a todos los de verde, pedir un autógrafo de un jugador boliviano valía más que la de cualquier figura de las otras selecciones, los pañuelos blancos y las lágrimas eran señal de comunión con sus jugadores.
Bolivia fue campeón del Sudamericano de 1963, que además le demostraba al contienente que era capaz de organizarlo y de ganarlo. Así un equipo que tiene las cuatro patas de una mesa niveladas y sólidas en el fútbol (dirigencia, cuerpo técnico, jugadores, hinchada, , puede consumar una hazaña impensada para muchos, y jamás igualada hasta hoy.
BOLIVIA CAMPEÓN EL VIDEO DE LATE