Fue un momento emotivo, Fabricio Fuentes, como casi todos los pilotos bolivianos pasó por la rampa con lágrimas en los ojos, estaba emocionado, por donde podía paraba, se sacaba fotos con la gente, gritaba gracias.
Bajó de su moto en la rampa, saludó al presidente, le agradeció una vez más esta oportunidad, recordó su origen, dijo ser una persona que viene de un lugar humilde y hoy se ve corriendo el Dakar, la competencia más importante del mundo, recordó cuando le costó eso, y dijo, “Bolivia puede generar esto, ahora lo que queremos es mar para Bolivia”.
Así como quien sabe que nada es imposible, el chaqueño tiró una frase que es un anhelo boliviano, y que sumó en pleno Dakar sonrisas, aplausos y admiración, en un momento tan personal, pensó en el país, grande Chaqueño!