Quedan contados días del extenso vínculo entre Boris Cespedes y Servette. El club en el que surgió profesionalmente oficializó que no continuará en la institución, una vez que el mediocampista boliviano-suizo culmine su contrato a fines de junio. Por más de 10 años, ha jugado entre el primer y el segundo equipo del Granate de Suiza. Ahí nació futbolísticamente y lo acompañó desde la Segunda hasta ser subcampeón de la Superliga.
Cespedes debutó en Servette II a sus 17 años en la Quinta División de Suiza. Previamente, gracias a sus condiciones, se ganó espacio en la Selección Sub-16 y en la Sub-18 de ese país. De esa forma, subió al primer equipo y debutó en la Challenge League, Segunda División, en agosto de 2013.
Hasta la temporada 2016-2017, Cespedes alternó entre los dos equipos de Servette y fue cedido por dos semestres discontinuos a un equipo de la Tercera División. Así también recibió el llamado de la Selección Sub-19 de Suiza. De ahí en más, fue parte del elenco que ascendió a Primera y se asentó en el Granate hasta el final de esta temporada logrando la clasificación a Champions League.
El boliviano-suizo registró 172 partidos con el plantel profesional de Servette con más de 10 mil minutos de juego, aportó con 11 goles y 4 asistencias. Además, llegó a debutar en la Europa League y en la Conference League. En el segundo equipo, tuvo 37 compromisos con un aporte goleador de 24 tantos.
Una lesión impidió que Cespedes juegue hasta la última fecha de la Superliga. Su despedida terminó siendo el 5 de abril en el empate a 2 goles con Lugano por la Copa Suiza. Ese día fue titular y jugó el primer tiempo. Servette agradeció a Boris Cespedes por su compromiso, su profesionalidad y el tiempo dedicado al club. Pronto a cumplir 28 años, buscará un nuevo rumbo en su carrera profesional.