Llegó como el comandante de una selección candidata a revelación y superó cualquier expectativa: la FIFA, además de la gente, se lo reconoció. Fue elegido como el mejor jugador de la Copa del Mundo.
¿Qué hizo para merecerlo? No sólo fue el armador de la sorprendente Croacia, sino que también se sacrificó para cumplir labores defensivas y terminó siendo uno de los que más corrieron en todo el certamen.
Según los datos de la FIFA, recorrió 72,3 km a lo largo de los siete partidos (694 minutos) que jugó y recuperó 31 balones –en función de ataque, generó 10 ocasiones (2 goles) y sirvió una asistencia–.
Con estos números, muchos se animan a postularlo para el Balón de Oro y el premio The Best al mejor futbolista del año, considerando que también fue importante para conseguir la Champions con el Real Madrid. ¿Acabará con el reinado de Lionel Messi y Cristiano Ronaldo?