No es una noticia más, Danny Nogales es un gladiador del Dakar, de los pocos que deciden cargar una mochila, las herramientas y la moto e ir al desafío más duro para los amantes del Rally, cumplió la odisea, y llegó a la meta y completó su primer Dakar en su segunda participación.
Fue la primera moto en llegar a Río Cuarto en Córdoba, fue el primero en largar, es que en la última especial es así, las motos invierten el orden, abrió camino en los últimos 64 kilómetros de competencia y logró el objetivo, “Hasta Buenos Aires no paramos”, repetía en La Paz, y así lo hizo, llegó a Buenos Aires.
¿La posición? no importa, los que saben del Dakar, saben que el primer objetivo es terminarlo, más aún yendo en esta especial categoría de motos, en las que los pilotos hacen etapas maratón las dos semanas de competencia. No fue fácil para Danny, los recortes en Tupiza, y las cancelaciones en La Paz y Salta, le vinieron bien, la suerte le jugó una buena en este Dakar, todo lo contrario a lo que fue en su primera participación, ¡fue su revancha!.
Danny se ganó un lugar en los corazones de los bolivianos, tanto, que una fanática le quiso pagar la gasolina en una recarga, carismático como pocos, humilde, sencillo, nunca le dijo no a ninguna foto, a ninguna nota, Nogales es un ejemplo de lucha, superación y sobre todo inspiración. Llegó a la meta.