Después de idas y venidas, Conmebol le dio una buena noticia a Bolivia, pues oficializó la reprogramación para este año del Sudamericano Sub-15 que debió realizarse el 2023. Lo más importante para el país es que se mantiene como sede del torneo. Desde el 29 de agosto hasta el 14 de septiembre, se desarrollará la competencia con la presencia de las 10 selecciones juveniles del continente.
Dado que la contienda debió jugarse el año pasado, la Dirección de Competiciones y Operaciones de la Conmebol decidió mantener la categoría máxima del 2023. Están habilitados todos los jugadores nacieron a partir del 1 de enero de 2008, es decir que muchos jóvenes de 16 años podrán representar a sus respectivos países.
En consecuencia, Pablo Escobar y su cuerpo técnico podrá dar continuidad a los trabajos realizados en 2023 con los mismos futbolistas que había considerado en un principio. Gracias al anuncio del máximo ente del continente, la FBF junto a la dirección técnica de las selecciones menores podrán programar los microciclos y los amistosos necesarios para que Bolivia llegue en las mejores condiciones.
Todavía no están definidas las ciudades ni los estadios que acogerán el Sudamericano Sub-15. En los próximos 4 meses y con las respectivas inspecciones de Conmebol, se escogerán al menos 2 escenarios deportivos. Posteriormente, se determinará el sistema de competencia y de ser necesario se realizará un sorteo. De todas formas, Bolivia, pese a la incertidumbre, se mantuvo como la anfitriona del campeonato.