MOSCÚ. Todo apuntaba a que se iba a dar el batacazo colombiano, todo, el entorno, el público, el gol sobre la hora para el empate, parecían que los planetas se habían alineado para que Colombia logre su gran objetivo.
Pero no se pudo, el penal cobrado -bien cobrado para Inglaterra- puso un suspenso grande, y sobre todo interrogantes, a por qué Colombia no se animó antes, luego de estar uno cero a abajo recién cambió el plan de Pekerman, con el gol de Harry Kane, inglaterra aseguró un negocio redondo, y pensó tener el partido en el bolsillo porque hasta ese momento el arco a Colombia le quedaba muy lejos.
Entonces apareció el espíritu combativo, un gran remate de media distancia de Uribe casi se mete en el ángulo, y ya pasados lo noventa, Colombia tenía un córner que terminó en gol con el corazón de millones de colombianos explotados en emoción, pero no se pudo, no hubo fiesta después de tremenda alegría.
En la tanda de penales, Ospina tapó uno, pero Colombia erró dos, uno que atajó bien Pickford. El resto fue la historia que lloró James -sin minutos por lesión- y toda Colombia, Dier anotó el quinto penal de la serie e Inglaterra supera una barrera inquebrantable desde 1966, ¡ganó una serie de penales!, y se vuelve a meter en cuartos de final de una Copa del Mundo, algo que no le pasaba desde Alemania 2006.
