Una de las principales incógnitas antes del partido ante Argentina en Córdoba era quien iba a llevar el cintillo de capitán ante las ausencias de los tradicionales y conocidos jugadores que eran designados para hacerlo.
Tras la ausencia de Zenteno por acumulación de amarillas y de Quiñonez por decisión técnica, el entrenador nacional, se decidió por aquel jugador que siempre ha empujado al equipo hacia adelante y siempre se ha puesto el equipo en la espalda y lo jaló en busca del gol, Alejandro Chumacero.
Al inicio del partido como parte del protocolo del partido no sólo posó para la posteridad con Lionel Messi, capitán argentino sino en un pequeño y simbólico acto de una fundación que trabaja con el fútbol, Chuma y Messi agarraron palas y echaron tierra a un árbol como símbolo de compromiso.
Cuando Chumacero dejó el campo de juego en el segundo tiempo al salir dejó el cintillo en el brazo de un nuevo estandarte de la Selección nacional, el atacante Juan Carlos Arce, quien atraviesa un gran momento a nivel personal. Ambos fueron los nuevos capitanes de la Verde que debe ahora dejar de lado las Clasificatorias y pensar en encarar una dura Copa América en Estados Unidos.