No hubo clasificación histórica, la Selección no pudo ante Uruguay y pasó a depender del partido entre Argentina y Venezuela que terminó empatado, sin goles y dejó a los dos clasificados y a la Verdecita eliminada.
Luego de un gran inicio en el torneo, con el triunfo sobre Perú, Bolivia se dio permiso a soñar, pero el destino no quiso que el equipo tenga un premio a su esfuerzo, dado que el trabajo tuvo muchos problemas, entre ellos el abandono sorpresivo del técnico, el cambio de entrenador, el equipo cumplió.
Terminó su participación en Ibarra, viendo el empate sin goles de los albicelestes y los venezolanos, con la pena de no haber podido clasificar, pero con el deber cumplido, y con la exigencia de que nuestra directiva tome en serio a esta y a las generaciones venideras, Bolivia tiene con qué, necesita que todos hagan su trabajo, dentro y fuera de la cancha.
-POSICIONES-