Este lunes, Bolivia enfrentará a Arabia Saudita por tercera vez en la historia. En las dos anteriores, no perdió: ganó 1-0 con gol de Erwin Sánchez en un amistoso previo al Mundial de Estados Unidos en 1994 y empató a cero por la fase de grupos de la Copa Confederaciones de 1999.
En aquella época, La Verde atravesaba uno de sus mejores momentos. Y Arabia, por otro lado, todavía no contaba con mucha experiencia compitiendo a un alto nivel. Pero ahora, el combinado perteneciente a la AFC llega de participar en la Copa del Mundo (estuvo en tres de las últimas cinco).
Bolivia tendrá en frente a un rival de cuidado que, además, jugará en condición de local. Aunque, de todos modos, el funcionamiento del equipo pesará mucho más que el resultado. Y servirá como parámetro para que César Farías sepa con quienes puede contar de cara a las competiciones oficiales.