La Academia estaba presionada, la goleada del Tigre un día antes lo forzaba a ganar para no quedar lejos en esta comprimida tabla de posiciones, por eso ganar en Cochabamba ante Aurora era vital, y Bolívar lo hizo, por la mínima y sufriendo, pero lo hizo. Ganó y sigue a dos puntos del líder a dos jornadas del Clásico Paceño.
Erwin Saavedra anotó el único gol del partido, un golazo, asistido por Riquelme, selló con un derechazo las redes del Félix Capriles para el deleite de la numerosa hinchada bolivarista en el Valle, que pudo ver más goles, es cierto, pero que a Bolívar le faltó serenidad y precisión, es también una realidad, por eso terminó con los fantasmas de Potosí en la cabeza y con mucho nerviosismo cerca de su arco.
Finalmente se dio el resultado, que era obligado, para la Academia. Los tres puntos ponen a Bolívar como único escolta, esperando lo que hagan Always Ready y Royal Pari al cerrar la fecha 19, y sobre todo dan un buen cierre al corto primer ciclo de Walter Flores como entrenador Celeste, que comenzará un nuevo ciclo en una semana decisiva para el campeonato.
