El único coche boliviano no pudo largar la etapa 3, es que el segundo día de competencia fue letal para el Bugguie Herrator.
A los problemas que tuvo en el primer día se sumó lo blando del suelo, quedó atascado en varias ocasiones y al pobre Barbery la máquina le respondió con un sobre calentamiento que la fundió, esos dos motivos, demoraron tanto al #395 de la carrera, y no pudo terminar la etapa 2.
Ahora Barbery apuesta por el reenganche, una modalidad nueva que impuso ASO para los que queden fuera de manera temprana en el Dakar. Para eso debe llegar a Arequipa en un largo enlace en tiempo y forma, solicitar el reenganche, corregir los problemas técnicos y pasar una nueva inspección técnica, para volver a la carrera luego del día de descanso.