Tuvieron que pasar 48 años para que un equipo argentino vuelva a llevarse los tres puntos del Siles. Fue el juego de Copa Libertadores entre Atlético Tucumán y The Strongest.
El Decano del fútbol argentino terminó con el mito a pesar de las declaraciones de Augusto Batalla “Es una cancha muy jodida e insalubre. No se puede jugar a 3600 metros de altura, tener tubos de oxígeno en el vestuario no es normal”, dijo el arquero, que aire tuvo y de sobra porque ganó todo el tiempo que Bazcuñan le dejó en el Siles.
A pesar de ello, el equipo de Zielinzki fue interesante, ambicioso y seguro, aunque el palo le jugó a favor en dos ocasiones, y un grave error en defensa de Gabriel Valverde fue determinante, fue un premio al buen partido y a la experiencia de un equipo que siempre supo a lo que jugaba, el partido en el Siles era una final para ellos y así le ganaron al Tigre, que perdió un invicto de 19 partidos jugando en el Siles por Copa Libertadores.
