Lágrimas de ansiedad previo al partido y al final se dividieron, unas fueron de alegría y las otras de frustración. La Final estuvo dividida en dos, la segunda terminó siendo no apta para cardíacos. Empataron en los 90 y con dos goles más en los 120. En penales, Argentina venció a Francia y liderados por Lionel Messi alcanzan la gloria en Qatar; 36 años después son campeones del mundo.
Increíblemente Argentina dominó el primer tiempo con excesiva superioridad. Jugó a gusto y placer. Anuló totalmente a Francia. Las emociones se acumulaban hasta que pasaron los 20 minutos. Di María intentó penetrar el área, Dembélé lo rozó, lo derribó y el árbitro cobró penal. Messi con seguridad y frialdad abrió el marcador.
A los 36, Argentina llegó al segundo por medio de una soberbia jugada colectica. Messi de primera habilitó a Álvarez, este filtró el pase para Mac Allister que metió la pelota al área por el ras del césped y Di María llegó para marcar el segundo. El resultado era merecido, Francia no había generado nada en ataque a tal punto que Deschamps sustituyó a Giroud y a Dembélé a los 38 minutos.
El segundo tiempo era idéntico con superioridad argentina. Aunque, a partir de la hora de juego, inició levemente la reacción europea y la peligrosa tranquilidad sudamericana. Es así que cerca a los 80 minutos Otamendi derribó notoriamente a Kolo Muani en el área. Mbappe con potencia hizo el descuento con el que Francia despertó.
Segundos después, Coman comenzó la jugada, pasó por Thuram y Mbappe de primera antes que la pelota caiga fusiló la portería de Martínez. Ese fue el segundo remate al arco de Francia. Los argentinos no podían creerlo, terminaron el tiempo reglamentario en shock hasta que llegó el pitazo final.
El tiempo extra se vivió a muerte. Hubo aproximaciones importantes en ambos campos. Al inicio de la segunda parte del alargue, filtraron el pase a Martínez, este remató, Lloris tapó y Messi cazó el rebote rematando inmediatamente. Si bien Koundé despejó, la pelota sobrepasó la línea de sentencia. Mientras se convalidaba el gol, el astro argentino se emocionó a los 109 minutos, aunque faltaba tiempo.
Diez minutos después, Francia volcada en ataque volvió a encontrar la luz. De una jugada a pelota parada y un despeje, el disparo francés pegó en la mano de Montiel. Se decretó la pena máxima, Mbappe nuevamente supo definir para batir a Martínez y para empatar la Final. Tanto ellos como Argentina tuvieron una opción más, pero no lograron el desequilibrio.
La definición pasó a la tanda de penales. Arrancaron las figuras, ambas anotaron. Le tocó a Coman y Dibu se lució con su volada para atajarle el disparo. Dybala adelantó a La Albiceleste. Después, Thchouaméni mandó afuera del arco su remate. Paredes y Kolo Muani no fallaron. Por azares del fútbol, quien hizo el segundo penal para Francia, definió la Copa del Mundo. Montiel engañó a Lloris y desató la emoción de todos sus aficionados, de los millones que se quedaron en su país y de cada uno de los que siguió a esta selección. Argentina es el nuevo tricampeón mundial de fútbol.
