El volante del Tigre finalmente partirá mañana rumbo a Brasil, su destino el Sport Recife, el acuerdo entre los empresarios y dirigentes de ambos clubes llegó y ahora Chumacero debe viajar para cumplir con la revisión médica.
Alejandro en comunicación con La Red Deportiva de La Paz, dijo que se siente bien, que por suerte el golpe en la rodilla no es más que eso, “Esperemos pasar la pruebas médicas para poder ya pensar en lo que viene” dijo.
Algo nostálgico ya habló de que la primera etapa el jugador partiría sólo, dejando a la familia y sobre todo a su pequeño hijo y sus padres.
Pero el desafío de pasar a la segunda división de la mejor liga del continente y la oferta económica que recibe el jugador es imposible de rechazar. Trascendió que la llegada de Chumacero al Sport Recife no es por la compra del 100% del pase, el Tigre logró mantener algún porcentaje para cuidar sus intereses si llegará a producirse una posible transferencia posterior de Chumacero.
Lo cierto es que esta noche Alejandro no será de la partida y que el Tigre comenzará a extrañarlo, ahora sí llegó la hora de despedir al ídolo.