El partido, que finalizó con un empate sin goles y debió ser interrumpido durante 43 minutos por tormentas eléctricas, tuvo una serie de jugadas con entradas agresivas al equipo inglés, entre ellas a Gerrard, que le costaron la tarjeta roja a Brayan Beckeles.
“Hubo algunas entradas horribles y nosotros estamos aliviados que no hubo lesionados. Ciertamente yo recibí una dura infracción en una oportunidad y otros de mis compañeros también. El árbitro (Ricardo Salazar) fue pobre en su desempeño. Es inexplicable cómo aunque pudo ver a un jugador tirarle un pelotazo a toda potencia directamente contra Daniel Sturridge, no le sacó la tarjeta roja”, dijo Gerrard.
Durante el partido, Sturridge fue además blanco de un vaso de bebida que le fue arrojado desde las tribunas.
Por su parte, el DT de Inglaterra, Roy Hodgson, admitió que el de anoche fue uno de los partidos “más frustrantes” del seleccionado en la campaña previa al Mundial.
Sin embargo, se mostró esperanzado por las perspectivas del grupo en el torneo. “Iniciamos el Mundial en buena forma mental y por suerte con sólo un lesionado”, dijo Hodgson.
En ese sentido, confirmó que el joven Alex-Oxlade Chamberlain estará en forma para jugar en el torneo, a pesar de haberse lesionado la rodilla durante el amistoso contra Ecuador del miércoles pasado, que finalizó con un empate 2-2.
Fuente: ANSA