La cancha en buen estado, elogiada por los visitantes, claro todos acostumbrados a la hierba a la que se debe jugar en el Samuel Vaca, estar en el gramado del Edgar Peña fue un lujo para varios, “algo duro” para los locales, esas fueron las reacciones tras el uno a uno y el estreno del nuevo estadio.
Mario Cronenbol, alcalde de Warnes por el MAS visitó al escenario deportivo y le entregó una copa a Marcos Ovejero por ser el primer jugador en anotar en este estadio. Allá donde reinaban las imágenes del Presidente Evo Morales, dando a entender que el estadio lo construyó el Alcalde con la ayuda del Presidente, claro, existe aún la pugna entre Warnes y la Asociación Cruceña de Fútbol. Unos se atribuyen su propiedad, otros quisieron demostrarla.
Lo cierto es que el fútbol boliviano estrenó nuevo estadio, moderno, con buena capacidad (17 mil), y una inversión de más de 50 millones para terminarlo, dieron como resultado este partido. Donde Ovejero se hizo héreo al abrir la cuenta, donde Bergese se verdugo al igualar cifras. Ganó el fútbol, que lo usen todos, los chicos de la ACF, los grandes de la Liga, que sea para que el fútbol crezca.