Fotos: Marka Registrada
Por distinto motivos dos de los máximos referentes del Tigre en la actualidad no pudieron estar presentes en la victoria contra Nacional. Ernesto Cristaldo y Pablo Escobar fueron suspendidos, el primero por expulsión y el segundo por acumulación de amarillas, y les tocó ver desde afuera el partido. Lo más lógico, o al menos a lo que estamos acostumbrados, hubiera sido que se infiltren entre los espectadores de la recta de Preferencia, o que se consiguieran un lugar en los palcos, pero la dupla paraguaya eligió vivir el partido desde adentro, de una manera poco usual.
Detrás de uno de los arcos de advirtió su presencia, intentando pasar desapercibidos, utilizando gorras, capuchas y agachando la mirada, pero inconfundibles. Ahí estaban, Teto y el Pájaro, disfrazados de pasapelotas, haciendo lo imposible para estar dentro de la cancha y brindar su apoyo a sus compañeros, que encaraban un partido crucial en sus aspiraciones por conseguir el título.
El partido tuvo de todo, se jugó en un horario inusual, fue azotado por la lluvia, estuvo interrumpido casi media hora por un apagón, pero la nota destacada del día la dieron sin duda Escobar y Cristaldo, que tuvieron que vivir la victoria desde afuera, pero lo más cerca posible. El próximo domingo volverán a sus roles habituales, a buscar los puntos contra Oriente en el Tahuichi, para dejar en claro que el Tigre sigue vivo, y luchará hasta el final.
