Tras la baja de Perú para la próxima competencia, se alteró la planificación; los franceses negocian con Argentina, que agrega etapas para contar con la largada y la llegada, aunque los términos no son, por ahora, coincidentes en la parte económica.
Para esta versión, Chile anunció su retiro del recorrido luego de los desastres naturales sufridos en ese país. El regreso de Perú, con su arena en lugar del Desierto de Atacama, equilibraba la hoja de ruta. Pero hace tres semanas, Perú dio la sorpresa al anunciar su retiro, debido a los efectos que pueda causar el impacto del Fenómeno del Niño en diversas regiones.
La variación del plan original obliga a la Argentina a incrementar su inversión original, algo que no está dispuesta a hacer por ahora. El anuncio del recorrido y mapa oficial de la carrera tras la salida del Perú quedó postergado aún sin fecha.
A partir de allí, el propio Etienne Lavigne, gestiona mayor participación económica de la Argentina, algo que por el momento ha sido un no rotundo y público de parte del Ministro Enrique Meyer de ese país.
Si bien las negociaciones continúan contra reloj, ya hay voces que se animan a decir que el Dakar el año que viene quedará en nada, y hasta se comienza a barajar la posibilidad que ASO vaya a explorar otros rumbos, Norte América, con México y Estados Unidos ya se hacen eco de esto para un futuro inmediato.