El presidente Evo Morales presentó el sábado sus respetos por la decisión de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) de mantener al timonel Mauricio Soria como director técnico de Bolivia y, a 3 meses del debut de la Selección en la Eliminatoria sudamericana para el Mundial Rusia 2018, demandó un régimen extraordinario de preparación que incluya una concentración cerrada que repare la imagen del fútbol nacional.
“Respetamos la decisión de la Federación Boliviana de Fútbol”, adoptada la víspera en la ciudad de Cochabamba, afirmó el mandatario boliviano en declaraciones a la ABI.
Morales dijo que la FBF tenía estrecho margen para ratificar a Soria o elegir a su sucesor a falta de tres meses del comienzo de la Eliminatoria sudamericana para el mundial en la euroasiática Rusia.
El presidente Morales indicó que Mauricio Soria y Eduardo Villegas, “son los únicos (técnicos) que tenemos”, en el país, en la actualidad.
“Pienso, en este momento, como todos los bolivianos que amamos entrañablemente a nuestro país y que queremos el fútbol y a nuestra selección, en una concentración cerrada, con la mayor parte de los jugadores nominados posible, en un proceso similar que permitió a Bolivia clasificar al Mundial de Estados Unidos (en 1994)”, esbozó una idea el gobernante.
El pensamiento de Morales sobre Soria se extendió a pesar que el DT proviene de un proceso altamente defectuoso, patente en la detención por sospechas de megacorrupción de Carlos Chávez, titular aún de la FBF y detenido en la cárcel de Palmasola hace semanas. “Sé que Soria nada tiene que ver” en el embrollo que se ventila en los estrados judiciales bolivianos dijo Morales.
