Resulta que Oriente no pudo pisar el césped del escenario del partido, tuvo que hacer el reconocimiento del campo desde un costado y tuvo que moverse por los bordes para no perder el día.
Cuando Oriente llegó a las 19 horas al estadio Parque Central, los funcionarios del club Nacional -propietarios del mismo- pidieron al equipo que no ingresarán.
Muy enojados Keko Álvarez y Carlos Aragones consiguieron el acceso, pero solo a los costados del campo. El dirigente uruguayo decía que una fumigación que fue programada para ese día impedía el pisar el césped.
Los orientistas terminaron por resignarse pero no antes del enojo:
“Nosotros los tratamos muy bien allá, no esperábamos este trato acá, pero lo que quieren es desconcentrarnos, pudieron avisarnos antes y no lo hicieron, nosotros vamos a mantenernos tranquilo y no dejaremos que nos saquen del partido”. Carlos Aragones