Un fallo inédito para la historia del fútbol profesional boliviano prohíbe a cuatro hinchas del Club Bolívar, entre ellos el jefe de una barra, ingresar a los estadios de fútbol durante un año, en tanto no exista una disposición contraria.
La resolución fue emitida ayer a mediodía por el juez Ricardo Maldonado, del Juzgado 5° de Instrucción en lo Penal de La Paz, quien encargó el cumplimiento de la misma al Viceministerio de Deportes, la Liga del Fútbol Profesional Boliviano, la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) y la Policía Nacional.
Durante la audiencia, que se prolongó por aproximadamente dos horas y se llevó a cabo en el Tribunal Departamental de Justicia de La Paz, fueron imputados por el Ministerio Público Israel Zambrano, jefe de la Vieja Escuela —la barra brava organizada de la Academia que suele ubicarse en la curva norte del estadio Hernando Siles—, Ángelo Arnez, Juan Rodrigo Callizaya y Diego Efraín Jou, también miembros de esa agrupación, todos acusados por faltar a la autoridad y provocar lesiones a tres uniformadas de la Policía Nacional.
El domingo, poco antes del partido entre Bolívar y San José, jugado en el escenario de Miraflores, miembros de la Vieja Escuela intentaron ingresar al recinto en estado de ebriedad, lo que está prohibido, y pretendieron provocar una avalancha para rebasar el control policial.
Los cuatro acusados agredieron con golpes a la coronel Basilia Meneses, encargada de la seguridad de esa jornada en La Paz, y a las cabos Rosmery Rodríguez y Genoveva Canaviri. Según dictaminó el juez, los cuatro hinchas celestes tienen un plazo de 72 horas para pagar una fianza de 72.000 bolivianos ante el Consejo de la Magistratura, y se dictó en contra de ellos la detención domiciliaria mientras continúe la investigación, en el caso de Zambrano con custodia policial.
Entre las medidas sustitutivas está una orden de arraigo y mandamiento de presentación ante el Fiscal los días viernes, a fin de firmar en el sistema biométrico.
La defensa de los acusados intentó que la detención domiciliaria fuera con autorización para que pudieran acudir a sus fuentes de trabajo, pedido que fue negado porque los cuatro hinchas no habían presentado pruebas contundentes de sus empleos.
El abogado Johnny Garnica, fiscal del caso, anunció que el proceso continuará hasta que el juez dicte el fallo final. En tanto, vestidas de civil, las oficiales que fueron agredidas se presentaron en la audiencia y dieron su versión de los hechos. Declararon que fueron atacadas cuando trataban de hacer cumplir el Decreto Supremo 1515, contra la violencia en los estadios.
Dos de los imputados reconocieron haber ingerido bebidas alcohólicas, sin embargo dijeron que fue en reuniones particulares, y descartaron haber participado en la parrillada organizada por la Vieja Escuela a mediodía del domingo, en el estadio Libertador Simón Bolívar, para celebrar el primer año de su creación. También denunciaron que fueron objeto de golpes y agresiones con gas lacrimógeno por parte de efectivos policiales cuando fueron aprehendidos.
Fuente: La Razón
