El triunfo de Bolivia sobre Venezuela significó un respiro para el equipo nacional porque mostró una idea y la ejecutó con efectividad en el Titán de Villa Ingenio. El ciclo de Óscar Villegas en La Verde inició de la mejor manera, la sinfonía sonó en El Alto y su principal director fue Ramiro Vaca.
El tarijeño abrió el camino hacia la victoria a los 13 minutos, un remate potente desde afuera del área infló las redes del arco norte y Rafael Romo no tuvo alternativa ante el lamento. Fue el quinto gol de Ramiro Vaca en la Absoluta, el tercero en un partido oficial, lo festejó sacándose la camiseta y mostrando su dorsal 10 al público que no paró de aplaudirlo. Esta acción provocó su segunda tarjeta amarilla en Eliminatorias, misma que impide que pueda enfrentar a Chile el martes en Santiago.
“Estábamos buscando esta alegría, me ganó la emoción en el gol y no sabía que si recibía otra tarjeta amarilla, me perdía el partido ante Chile”, comentó. En 90 minutos de juego tuvo 3 remates, 2 pases clave y 39 de 44 pases a destino. El cuerpo técnico lo desafectó de la concentración y retornará a la disciplina de Bolívar.