El color y el fútbol se apoderaron de Cochabamba para recibir a Wilstermann y Bolívar, duelo que siempre tuvo una rivalidad marcada y en esta ocasión no fue la excepción. La fórmula de Flavio Robatto tuvo resultado, sufrir sobre el final era posible pero la jerarquía e inteligencia salieron a flote para volver a ganar de visitante.
Desde el primer tiempo, la intención de la Academia fue notoria, adueñarse del balón, ganar gran parte de los duelos y obtener comodidad en el campo eran las claves para el protagonismo. El único remate a puerta fue una construcción entre Francisco Da Costa, Ramiro Vaca y Luis Paz por la banda izquierda, el 8 la picó pero el esférico se encontró con el poste y no ingresó.
Con mayor paridad en el complemento, ambos buscaron romper el cero y Bolívar lo consiguió a los 56 minutos con un nuevo intento por lan izquierda, Paz envió el centro para el segundo palo y Fernando Saucedo cumplió con la ley del ex. Wilstermann igualó a los 63 con un saque de banda de Marvin Bejarano, la pelota se dirigió hacía el corazón del área y Alejandro Chumacero concretó, sin embargo, Juan Nelio García invalidó todo luego de revisar en el VAR por una falta Ariel Nahuelpan sobre Renzo Orihuela.
El Rojo estaba concentrado en su fase ofensiva, la más clara fue un tiro libre de Nahuelpan que Andrés Desábato rechazó con personalidad. Mientras tanto, no tardó en llegar el segundo para la Academia una vez más mediante Saucedo que recibió el toque de Da Costa y desde afuera del área superó a Arnaldo Giménez con un remate acomodado a su palo derecho.
El descuento llegó a los 88, Marvin aprovechó una carambola en el área y no falló pero después los minutos finales consumieron el partido que ya tenía a su favorito. La siguiente parada para Wilstermann será el martes contra Tomayapo por la Copa Sudamericana, mientras que Bolívar pensará en el clásico paceño del 10 de marzo con la baja de Leonel Justiniano por acumulación de tarjetas amarillas y la preocupación por Da Costa que salió del Capriles con molestias físicas.
