Por un pelín. Tras la finalización de la Liga Tigo 2023, la agonía por la permanencia tuvo un final abrumador, pero satisfactoria para Oriente Petrolero, tras llevarse la victoria en la última jornada y ser salvado de toda posibilidad del descenso indirecto y directo. Sin embargo, el cuadro cruceño no tuvo un buen año esperado en la competencia nacional e internacional.
Este año el torneo boliviano trajo muchas emociones a los jugadores y a la afición, desde la alegría de participar y avanzar en copas internacionales, o disputar un título, hasta sufrir en la pelea de la zona roja. En este margen, la angustia es mayor por intentar sacar resultados, que al final no se logren concretar y estar al pendiente de uno mismo y de los demás, para evitar perder la categoría y llevarse una fisura en el corazón del equipo como de la hinchada.
Todo este proceso lo vivió uno de los grandes de Bolivia, Oriente Petrolero, que tuvo un año futbolístico desequilibrado, con cambios de ritmo y de comando técnico. Los Refineros empezaron el año con pie derecho al mando de Erwin Sanchez, logrando participar en fase de grupos de la Sudamericana, además de iniciar el torneo ganando contra Nacional Potosí. Quien a pensarlo que, de tener un año de maravilla iba a terminar en peligro.
En la Copa Sudamericana consiguió su ingreso a fase de grupos al vencer a Guabirá en primera ronda. Sin embargo, los resultados no fueron los esperados en los enfrentamientos que tuvo contra Estudiantes de La Plata (Argentina), Bragantino (Brasil) y Tacuary (Paraguay). En lo largo de los seis partidos disputados, todos terminaron en derrota para Oriente Petrolero, que solo lograron anotar dos goles contra los paraguayos de Daniel Rojas y Cristian Álvarez.
A nivel nacional, si bien iniciaron ganando en su primer partido, no fue suficiente para mantenerse en el mismo ritmo, también afectado por los cambios en el mando técnico. Pasaron cuatro entrenadores en toda la temporada para conseguir resultados favorables y constantes: Erwin Sánchez, Ángel Guillermo Hoyos, Antonio Puche y Rodrigo Venegas.
En margen futbolístico de la Copa Tigo, Oriente Petrolero tampoco tuvo resultados positivos, perdiendo la clasificación a la siguiente ronda de cuartos. Disputó en el grupo A junto Bolívar,Wilstermann, Libertad Gran Mamoré, Real Tomayapo y Royal Pari, y terminó ocupando el último lugar con 6 puntos. Tras diez partidos jugados, solo logró vencer únicamente a Royal Pari, luego acumuló un total de tres empates y seis derrotas.
Por último, no hubo mucha diferencia en el torneo de la Liga. En el todos contra todos, se disputaron 32 duelos durante el año, que para Oriente se dividió en tres tiempos de inconformidad. Su mala racha empezó cuando cayó por la liga contra Royal Pari en marzo, luego pudo levantarse hasta que volvió a caer a mediados de junio. Por último, los días rojos se asomaron con más complicación en octubre, peligrando su lugar en primera.
Con la victoria contra Wilstermann, sumó 11 victorias; pero tuvo 12 derrotas y un total de 9 empates. Sin embargo, con el formato del punto promedio, los Refineros lograron quedarse en la División Profesional sin ningún peligro de indirecto. Ahora tendrá que recomponerse y asumir con cuenta nueva la temporada 2024.
