El Clásico Cruceño se pintó de Celeste en el último minuto de juego, tras un buen partido, entretenido y con muchas opciones en los dos arcos, fue el equipo Celeste de Blooming el que se llevó los puntos.
Que había comenzado ganando, un gol de Fernando Arismendi a los seis minutos de iniciado el partido, que siempre fue cambiante, en el dominio y en la intensidad de juego, Oriente que salió con muchos jovenes, cuidando a los dos goleadores del año: Dorrego y Suárez, pensando en la Sudamericana.
El Refinero encontró el empate con uno de los goleadores, Hugo Dorrego puso el 1-1 parcial, es que Platiní Sanchez tuvo que incluír al equipo estelar ante la coyuntura de estar abajo en el marcador, pero no fue suficiente.
Ya en el tiempo de descuento y cuando el partido estaba por expirar, pero con un marcador abierto por lo intenso del juego, apareció Tavares, tras una gran asistencia de Jr Sánchez -la gran figura del Clasico- el goleador que adquirió Blooming para esto anotó para darle goles importantes, y cumplió, anotó el 1-2 final del Clásico Cruceño antes del epílogo para darle la punta en el grupo de la muerte.
“Esta sensación es único, solo los que estuvieron aquí saben lo que se siente.”
Jefferson Tavares sobre el Clásico Cruceño.