Las fases previas de la Copa Libertadores son así, hay que ser inteligente jugando fuera de casa y muy intenso y efectivo jugando en casa. El Tigre evitó que el cuadro ecuatoriano sea efectivo y fue inteligente para sotener el cero a cero en el Atahuallpa de Quito con un jugador menos.
Es que al Tigre se le vino un dejavú de la primera fase de Copa, una torpe patadad e Martin Prost -sin intención- pero irresponsable, impactó con el arquero ecuatoriano y a los 36 minutos del primer tiempo se fue expulsado.
Pero el Tigre supo sostener el ritmo, acomodarse mejor en la cancha y cuando algo del distema defensivo falló, estaba Viscarra, de gran partido en Quito. Así transcurrieron los 90 minutos, entre tímidos y frios intentos locales y un partido que se fue acomodando a los deseos de Díaz.
“Los jugadores redoblaron esfuerzos, sabíamos que ibamos a sufrir y la llave esta abierta”
Cristian Diaz