El equipo Aviador dio una lección una vez más, porque Álvaro Peña y su equipo parecen inmunes a las bajas, no es la primera vez, pero si era una parada difícil, al frente estaba el Tigre, y la necesidad de ganar para no quedar fuera del lote de los de arriba, y lo hizo un a vez más.
La gran clave del partido estuvo en cómo se consolidó la zaga del Rojo, sin Alex -ya hace rato sin Zenteno- plantó a Ronny Montero y al joven Sebastián Reyes (21 años), y cumplió bien, ni qué decir del arquero Arnaldo Giménez, fue una de las grandes figuras del partido bajo los tres palos.
Todo lo contrario pasó con el Tigre, la ausencia de Fernando Martelli le pasó un costo altísimo. La dupla de Maximiliano Ortiz y Gabriel Valverde siempre se mostró endeble, y con jugadores como Serginho, Pochi Chávez, el Aviador hizo diferencia temprano, situación que la reconoció el propio DT Farías
“Ellos fueron muy sólidos atrás, mucho más que nosotros y con un arquero que sacó pelotas importantes. El rival marcó diferencia ahí en la solidez defensiva”, dijo y explicó el DT del Tigre.
Mientras que por el lado del Aviador, el gran artífice del partido, Arnaldo Giménez, que había terminado enojado tras el duelo en Oruro, y explotó en sus redes sociales, se sacó la espina con un partidazo, sacó una pelota increíble a Raúl Castro en el 0-0 y a Henry Vaca sobre el final cuando ya estaba 3-1 el partido, entre muchas otras situaciones.
“Sabíamos que este partido teníamos que ganarlo como sea, hace unos días tuvimos algo muy feo que nos tocó bastante, pero esto es fútbol y teníamos que reponernos por la responsabilidad que teníamos de ganar”, dijo el arquero Paraguayo.
